Mecanismos para abrir puertas, Adolf |
Una vez
frente a la puerta, toca tres amistosas veces. Mientras escuchas dentro pasos, voces o
trastos caerse, mide tu aliento, tu pelo, tu ropa y lo que tengas que decir. Si
abre el papá, sé conciso; si abre la mamá, sé sincero; si abre la hija, sé
conciso —papá escucha—, sé sincero —mamá también— y
sé coqueto. Si la puerta se abre por sí sola, procúrate con rapidez el álbum
familiar; con cuidado el trabuco del padre; con delicadeza la marihuana de la
hija. Y para la próxima, evita aplastar el hámster.
___
Comentarios
Publicar un comentario