Alejandro Salgado Meneses |
Después de haber pasado su eternidad al pie del valle, el abuelo deseó morir en la montaña. Lástima haber omitido la falta de oxígeno, esa que lo hacía pedirme a gritos mudos que lo sacara al balcón a ver si un ventarrón le colmaba sus pulmones. Cómo olvidar al abuelo respirando silbidos y desabrochándose la camisa tratando de sorber el aire por sus macilentos pelos. Cómo no recordarlo meciéndose con su cara roja y sus venas saltando por mis ojos que no sabían qué llevarle además del agua y la toalla para que se ventilara. Hasta que decidí comprarle una máquina de oxígeno al deshilachado abuelo para distraer su muerte. Le hubieran visto la pose serena con la que murió, la que dio brinquitos cuando le separé el catéter que llevaba de nuevo al pie del valle para ganar con qué asistir su velorio.
El Pedregal, diciembre de 2019
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Revista Tecnológico de Antioquia, Medellín, Colombia, núm. 7, diciembre de 2022.
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